Integrantes de la agrupación La Tianguis Disidente se instalaron nuevamente en la recién remodelada glorieta de Insurgentes –que presumió el ex jefe de Gobierno Martí Batres con inversión de 14 millones de pesos– que ayer estuvo ocupada con mercancía que colocaron en el piso sobre pedazos de tela y ropa colgada en ganchos de la infraestructura de la estación del Metrobús.
Señalaron que empezaron mesas de diálogo con autoridades de la actual administración, las cuales autorizaron que se colocaran, mientras el lunes prevén realizar una manifestación en la glorieta para presionar
que se les asignen lugares de manera permanente, en tanto que este sábado y domingo podrían no estar, con base en el acuerdo previo.
En una lona, las integrantes exponen que de acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos exigimos el derecho a un trabajo digno y socialmente útil o a la profesión, industria o comercio
, del cual aseguran que por su orientación sexual, vestimenta e identidad de género se les ha excluido, discriminado y negado
.
El pasado 26 de julio las autoridades retiraron a agrupaciones y vendedores ambulantes que ocupaban la glorieta y el paso a desnivel que conduce a la calle Génova, luego de quejas ciudadanas porque se perpetraban asaltos, había riñas, venta de drogas y se ejercía la prostitución.
El 30 de septiembre reabrió la glorieta en la que se encuentra un laboratorio de derechos humanos administrado por la Secretaría de Bienestar e Igualdad Social y un biciestacionamiento con capacidad para 99 bicicletas, que aún no funciona, así como un módulo de la policía turística.
Los locatarios de la glorieta entrevistados dijeron estar en contra de la presencia de los vendedores porque hay riesgo de que la zona se vuelva insegura nuevamente
, al señalar que se colocan afuera de sus negocios, lo que les ocasiona pérdidas económicas.
Alicia –quien labora en un restaurante de la Zona Rosa– dijo: ya se habían tardado, para eso la remodelaron. Al rato van a llegar todos los demás y otra vez no vas a poder caminar, se va a volver inseguro
, a pesar de que a unos metros se encuentra la sede de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
La Zona Rosa, en el abandono
Por otra parte, vecinos de la colonia Juárez reprocharon al gobierno capitalino y a la alcaldía Cuauhtémoc el abandono y deterioro de la Zona Rosa, en la que hay autorizaciones irregulares para que operen restaurantes que son chelerías
, establecimientos que ocupan aceras y calles con mesas y sillas, exceso de ruido, aumento del comercio ambulante, tiraderos de basura en la calle y jardineras, así como incremento de personas en situación vulnerable que no son atendidas.
Sergio González, residente del área desde hace dos décadas, mencionó que no se conocen los avances del Plan Maestro Zona Rosa de la pasada administración, que creó el concepto repoblamiento incluyente
.
Lamentó que en gobiernos pasados hayan ocurrido disputas absurdas por la Zona Rosa, pero al final se quedó en el desamparo gubernamental de todos los niveles, dejó de ser el lugar de la era de José Luis Cuevas, de las galerías de arte, para convertirse en un antrismo
.
Algunas personas en situación de calle caminan por ahí, mientras otro grupo pernocta desde hace varios meses en un espacio del gimnasio abierto conocido como Barras Insurgentes, y en la calle Génova permanece el ambulantaje, que llega hasta Reforma.