



El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que el Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) fue un acuerdo “muy efectivo”, pero los países deben seguir las reglas y en 2026 será renegociado; sin embargo, aún no sabe si es necesario continuar con él, aunque destacó que cumplió con el propósito de eliminar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el cual no fue benéfico para su país. Respecto al tema, La Razón consultó a la Secretaría de Economía (SE) y al Consejo Coordinador Empresarial (CCE), que declinaron emitir algún pronunciamiento.
“En realidad fue muy efectivo (T-MEC) y todavía lo es, pero la gente tiene que seguirlo. Ese ha sido un problema, porque la gente no lo ha seguido. Pero fue un paso de transición y como sabes, termina bastante pronto. Se renegociará muy pronto. Pero pensé que fue un paso muy positivo con respecto al TLCAN, que fue el peor acuerdo comercial en la historia de nuestro país”, indicó el mandatario durante su reunión con el primer ministro de Canadá, Mark Carney.
- El Dato: Déficit comercial de EU con México en el primer trimestre se incrementó 47,253.6 mdd, un aumento de 19.07% contra el mismo periodo de 2024.
Durante la reunión, Carney mencionó que el T-MEC debería tener algunos cambios que sean acordes a las renegociaciones de 2026. Asimismo, Trump mencionó que no sabe qué tan necesario es continuar con el T-MEC y a pesar de que ambos mantuvieron la civilidad, el presidente estadounidense insistió en convertir a Canadá en el estado 51, a lo que el primer ministro respondió que su nación “no está en venta” y Trump reviró: “el tiempo lo dirá”.
Adolfo Laborde, profesor investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), aseguró a que las declaraciones del mandatario estadounidense son un claro mensaje hacia México y consideró que, actualmente, el tratado comercial ya no tiene sentido porque el acuerdo debía facilitar “la liberalización comercial” y se evitarían los aranceles, pero eso ya no sucede. “No sé si sea válido esto a estas alturas, porque ya hemos tenido una serie de atentados contra el T-MEC. Estamos pagando arancel sobre la composición regional de América del Norte, arancel sobre acero, aluminio y hay algunas partidas que no se están negociando a través del T-MEC, sino a través de la Organización Mundial de Comercio (OMC)”, indicó. El especialista consideró que, del total del comercio entre México y Estados Unidos, alrededor de un 30 o 40 por ciento ya pagan tarifas arancelarias de 25 por ciento, incluidas las mercancías de acero, aluminio y de la industria automotriz.
“Quiere decir que técnicamente el T-MEC pues ya no tiene sentido porque es un acuerdo para facilitar la liberalización comercial a través de la excepción de barreras arancelarias… El espíritu del libre comercio ya no existe”, añadió Laborde, y concluyó que México ha admitido que así sea porque “no nos estamos yendo a un panel de solución de controversias vía el T-MEC o la OMC; esto, desde luego, significa que estamos aceptando que el trato que recibamos sea menos malo del que están recibiendo otros países como China”. Las declaraciones del presidente Donald Trump son un parteaguas para que Estados Unidos presione la política comercial de México respecto a China, indicó el profesor del CIDE.
Y en el caso de que el presidente estadounidense decidiera terminar con el T-MEC, Laborde prevé que probablemente se establecería un “nuevo sistema de imposición de barreras arancelarias”, como sucedió hace unas semanas cuando estableció aranceles desde el 10 por ciento hasta 145 por ciento, y sería así porque Donald Trump ya ha asegurado que no reconoce a los organismos internacionales de libre comercio porque los países, a través de estas entidades, han abusado de Estados Unidos. “Pienso que lo que va a suceder es que no va a haber comercio vía OMC, sino que va a establecer un mecanismo unilateral de establecimiento de aranceles propios que dependerá de cada país”, argumentó el especialista. En ese supuesto caso, México tendría que responder con una política comercial espejo “dependiendo del arancel que nos establezcan”.
Por su parte, Josafat Hernández, profesor investigador del CIDE, consideró que la eliminación del T-MEC es poco probable “porque Estados Unidos no tiene mucho que ganar cancelando el acuerdo”. Esto debido a que es gracias a ese tratado comercial, que puede justificar la imposición de aranceles de forma unilateral con el argumento de una emergencia de seguridad nacional, y porque también por el T-MEC ha logrado mantener “limitado” al capital chino en México. “Veo que hay pocos incentivos de parte del gobierno de Estados Unidos para cancelar el T-MEC, pero creo que les viene muy bien como discurso de estar jugando con la incertidumbre y a su vez como parte de la política de chantaje les es muy funcional mantener el tratado”, indicó. En el caso de que sólo sea la renegociación, explicó que la medida reduciría la incertidumbre sobre México, pero las negociaciones serían muy complicadas, porque “no me queda claro que estén dispuestos a ceder los estadounidenses y me queda claro que ellos van a exigir todo”.
“Me parece que también hay un uso pragmático de la estrategia de introducir incertidumbre para generar la apariencia de que se puede cambiar las reglas del juego y después él (Trump) aparece como alguien flexible, el salvador de la economía que trata de reducir la incertidumbre que él introdujo”, concluyó.



