LONDRES.
La firma de lencería de lujo Rigby & Peller ha perdido su sello real, que se otorga a los suministradores de la monarquía británica, después de que su antigua dueña publicara un libro donde explica cómo le tomaba medidas a la reina Isabel II, informa hoy The Daily Telegraph.
Según el diario, el lord Chamberlain o jefe de la Casa Real comunicó por carta la pérdida del título a June Keaton, de 82 años, después de que ésta publicara el pasado marzo una autobiografía en la que detalla sus visitas al palacio de Buckingham.
Un portavoz de la Asociación de poseedores del sello real confirmó al rotativo que la empresa, fundada en Londres en 1939, ha perdido la garantía real, que tenía desde 1960, y debe retirarla de sus establecimientos y material publicitario.
Keaton, que poseyó la firma con su esposo desde 1982 hasta 2011, atendió a la soberana, de 91 años, y a las fallecidas princesa Diana, la reina Madre y la princesa Margarita.
Con los calzones abajo
En el libro explica, por ejemplo, que Isabel II estaba medio desvestida y a menudo acompañada de sus perros cuando le tomaba las medidas para los sujetadores, mientras que Diana de Gales guardaba pósteres de modelos en ropa interior para que sus hijos los colgaran en su habitación del internado de Eton, dice el Telegraph.
“Es muy triste que no les haya gustado y me está costando mucho aceptarlo. Es horrible y una gran sorpresa”, declaró al diario la anciana, que afirma que su libro no contiene nada “irreverente” y que no pretendía “disgustar a nadie”.
“Estoy orgullosa de lo que he conseguido en la vida y simplemente quería compartirlo”, agregó Keaton, que transformó la pequeña tienda en una marca de atractivo global.
Un portavoz de Rigby & Peller, cuyo accionista mayoritario es actualmente la firma belga Van del Velde, dijo que estaban “muy entristecidos” con la pérdida de la llamada “Royal Warrant” y declinó entrar en detalles “por respeto a su Majestad”.
Keaton vendió la mayor parte de Rigby & Peller en 2011 a Van del Velde, si bien permaneció en el consejo de administración y siguió tomando medidas para su ropa interior a Isabel II, aseguró el periódico.
A día de hoy, existen en el Reino Unido unos 800 artesanos o establecimientos que ostentan el preciado sello real, que se otorga a quienes suministran durante al menos cinco años a la soberana, a su esposo, el príncipe de Edimburgo, o al príncipe Carlos, heredero al trono.