El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el viernes que había ordenado al ejército desarrollar un plan dual para evacuar a civiles de Rafah, en el sur de Gaza, y derrotar a los batallones restantes de Hamás, mientras aumenta la presión internacional sobre Israel.
Israel lanzó el viernes un mortífero ataque aéreo contra la ciudad de Rafah, la última parte del enclave donde los habitantes de Gaza han encontrado refugio, a pesar de las críticas a su ofensiva por parte del presidente estadunidense Joe Biden y las advertencias de los grupos de ayuda sobre un alto número de muertos entre los palestinos si avanza hacia la zona.
La preocupación internacional por el destino de cientos de miles de desplazados de Gaza que se refugian en Rafah ha aumentado desde que Israel amenazó con un ataque terrestre a la ciudad, en la frontera con Egipto.
Washington dijo el jueves que no apoyaría ninguna operación militar israelí lanzada en Rafah sin la debida consideración por la difícil situación de los civiles, y Biden describió la respuesta de Israel a los ataques de Hamás del 7 de octubre como “exagerada”.