Algunas familias de Gaza usan pulseras con su identificación, con la esperanza de encontrar a sus seres queridos en caso de que mueran, debido a que la gran cantidad de cadáveres ha llevado a los palestinos ha sepultar a los muertos no identificados en fosas comunes, poniéndoles un número en lugar de un nombre, dicen los residentes.
La familia El-Daba ha intentado reducir el riesgo de ser abatida durante el bombardeo israelí más intenso de la historia sobre Gaza. Israel lanzó los ataques aéreos después de que militantes de Hamás atacaron ciudades israelíes el 7 de octubre, mataron a 1,400 personas y tomaron rehenes.
Ali El-Daba, de 40 años, dijo que había visto cuerpos destrozados por los bombardeos y que estaban irreconocibles.
Dijo que decidió dividir a su familia para evitar que todos mueran en un solo ataque. Agregó que su esposa Lina, de 42 años, se quedó con dos de sus hijos y dos hijas en la ciudad de Gaza, en el norte, y que él se trasladó a Jan Yunis, en el sur, con otros tres hijos.
El-Daba dijo que se estaba preparando para lo peor. Compró pulseras de cordón azul para los miembros de su familia y se las ató a ambas muñecas. «Si pasa algo», dijo, «así los reconoceré».
Otras familias palestinas también compraban o fabricaban pulseras para sus hijos o escribían sus nombres en los brazos.
Fosas comunes
Los clérigos musulmanes locales han autorizado los entierros masivos. Antes del entierro, los médicos guardan fotos y muestras de sangre de los muertos y les asignan números.
El Ejército israelí ha pedido a la población que abandone el norte de la Franja de Gaza, uno de los lugares más densamente poblados del mundo, y se dirija al sur porque es más seguro. Sin embargo, ha realizado ataques aéreos contra todo el enclave gobernado por Hamás.
Un portavoz militar israelí declaró: «Las IDF (Fuerzas de Defensa de Israel) han estado animando a los residentes del norte de la Franja de Gaza a desplazarse hacia el sur y a no permanecer en las proximidades de los objetivos terroristas de Hamás dentro de la ciudad de Gaza».
«Pero, en última instancia, Hamás se ha atrincherado entre la población civil en toda la Franja de Gaza. Así que dondequiera que surja un objetivo de Hamás, las FDI lo atacarán para frustrar las capacidades terroristas del grupo, al tiempo que toman las precauciones factibles para mitigar el daño a los civiles no implicados».
El Ejército israelí intensificó sus bombardeos sobre el sur de Gaza durante la noche, tras uno de los días más mortíferos para los palestinos desde el 7 de octubre. Los líderes mundiales han pedido el cese de los combates para permitir la entrada de ayuda al enclave asediado, que se está quedando sin agua, alimentos, combustible y medicinas.
Un total de 756 palestinos, entre ellos 344 niños, murieron en las últimas 24 horas, informó el miércoles el Ministerio de Salud de Gaza. Según el ministerio, al menos 6,546 palestinos han muerto a causa de los bombardeos israelíes desde el 7 de octubre, entre ellos 2,704 niños.
