Garantiza Estado seguridad en Guaymas y Empalme

HERMOSILLO, Sonora

Con la presencia de elementos de las policías Estatal, Federal y Gendarmería se cubre la zona de Guaymas y Empalme, con lo que se pretende garantizar la seguridad después de los hechos violentos.

La gobernadora Claudia Pavlovich Arellano manifestó que están haciendo un esfuerzo por parte de las corporaciones policiacas para mantener la calma, pues en redes sociales circulan videos e imágenes violentas que no son del Estado y crean sicosis entre la población.

«Hay veces que son noticias falsas, intenciones en querer alarmar de más a la ciudadanía; eso me parece muy delicado, porque son temas que no es ni para sobrealarmarse, pero tampoco para desestimar», destacó.

La titular del Ejecutivo estatal dijo que no desestima el problema, por lo que en coordinación con la Secretaría de Gobernación se está trabajando para llevar calma a Guaymas y San Carlos.

«Ya está en este momento en tranquilidad Guaymas y San Carlos con todas las corporaciones policiacas, lamentablemente con ausencia de algunas que son las que deberían de estar presentes.

«Hay que estar allá para ver lo que se vive; están los hoteles, los restaurantes y la vida normal gracias a que las corporaciones policiacas están tomando cartas en el asunto», señaló.

En Sonora hay gente buena, trabajadora, de bien, que se dedica a actividades lícitas, puntualizó, y por ellas es por las que trabajará, sin desestimar nada, mucho menos temas tan delicados como la seguridad de los sonorenses.

Sin atender problemas alcalde de Guaymas
Para exigir justicia por la desaparición forzada de tres jóvenes, alrededor de mil personas pusieron en jaque a San Carlos, y el presidente municipal Lorenzo de Cima se mantuvo ausente.

Los protestantes llegaron a San Carlos alrededor de las 12:00 horas y se detuvieron en la plaza donde se ubica la Oficina de Convenciones y Visitantes para organizarse y definir las acciones que llevarían a cabo.

A gritos exigían justicia para los jóvenes desaparecidos y la atención de parte del alcalde, sin que ninguno de ellos fuera escuchados causando afectación a decenas de automovilistas que salían o entraban al polo turístico.