EU escala disputa por maíz; México mantiene posición contra transgénico

Estados Unidos solicitó un panel de consulta para la resolución de controversias con México, en el marco del T-MEC, ante su negativa para adquirir maíz genéticamente modificado de ese país, en perjuicio de sus productores agrícolas, anunció la representante Comercial, Katherine Tai.

“Estados Unidos ha expresado repetidamente su preocupación de que las políticas biotecnológicas de México no se basan en la ciencia y amenazan con interrumpir las exportaciones estadounidenses a México en detrimento de los productores agrícolas, lo que a su vez puede exacerbar los desafíos de seguridad alimentaria”, advirtió la funcionaria estadounidense.

Tai acusó a México de imponer políticas biotecnológicas que “sofocan” la innovación agrícola utilizada por los campesinos estadounidenses para aumentar la productividad, responder a los desafíos que impone el cambio climático y al mismo tiempo mejorar sus condiciones de vida.

Sin embargo, destacó que la administración Biden mantendrá el trabajo de supervisión para que los consumidores accedan a alimentos seguros y de bajo costo. “Continuaremos trabajando con el Gobierno mexicano a través de estas consultas para resolver nuestras inquietudes y ayudar a garantizar que los consumidores puedan continuar accediendo a alimentos y productos agrícolas seguros y asequibles”.

Por su parte, el secretario de Agricultura Tom Vilsack advirtió que su oficina “apoya el éxito de todos los agricultores, y eso significa adoptar un comercio justo, abierto, científico y basado en reglas. Con este espíritu, el T-MEC se redactó para garantizar que los productores de los tres países tengan acceso completo y justo a los mercados de los demás”.

EU Ha expresado repetidamente su preocupación de que las políticas biotecnológicas de México no se basan en la ciencia y amenazan con interrumpir las exportaciones estadounidenses

Katherine Tai

Representante Comercial de Estados Unidos

Según el funcionario, los alimentos genéticamente modificados han demostrado por décadas que son seguros. “Discrepamos fundamentalmente de la posición que ha tomado México en el tema de la biotecnología, que ha demostrado ser segura durante décadas. A través de esta acción, estamos ejerciendo nuestros derechos bajo el TMEC mientras apoyamos la innovación, la seguridad nutricional, la sostenibilidad y el éxito mutuo de nuestros agricultores y productores”.

Las quejas estadounidenses se originaron por el decreto del Presidente Andrés Manuel López Obrador, publicado el 13 de febrero de 2023, que prohíbe el uso de maíz transgénico para la elaboración de tortillas o masa para el consumo humano. Además, el decreto también ordena a las diferentes instituciones para que se vaya sustituyendo de manera gradual el uso de este grano para alimentos procesados para el consumo humano o de los animales.

En opinión de los representantes “las medidas de México parecen ser incompatibles con varias de sus obligaciones en los capítulos de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias y Acceso a Mercados del T-MEC”.

Esto a pesar de que la representante comercial Tai y la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro han sostenido conversaciones respecto a las restricciones impuestas por México. “En marzo de 2023, Estados Unidos solicitó y celebró consultas técnicas con México con respecto a sus medidas biotecnológicas bajo el capítulo Medidas Sanitarias y Fitosanitarias del T-MEC, pero las consultas no resolvieron el asunto”, dice el comunicado de la oficina de Katherine Tai.

El documento establece que “Estados Unidos que consideraría todas las opciones, incluidas medidas adicionales para hacer valer sus derechos contenidos en el T-MEC, si México no regresa a las políticas de biotecnología basadas en la ciencia que ponen en riesgo el cumplimiento de los compromisos adquiridos dentro del T-MEC. A través de la acción anunciada hoy, buscaremos trabajar con el gobierno mexicano para resolver completamente las preocupaciones de los Estados Unidos”.

México defenderá postura en las consultas con socio
Luego de la petición de Estados Unidos para instalar un panel sobre las controversias al uso de glifosato y maíz transgénico, la Secretaría de Economía (SE) aseguró anoche que defenderá la postura del Gobierno mexicano sobre el tema.

A través de un comunicado, la dependencia indicó que recibió la solicitud del vecino país para iniciar las consultas dentro del Tratado de Libre Comercio contra las acciones que ha tomado nuestro país; en el documento, la SE dijo estar confiada en que podrá demostrar que el uso de maíz nativo para consumo humano no tiene afectación ni interés comercial para Estados Unidos, pues México produce el doble de lo que se destina a este propósito.

En materia de regulación, la SE dio a conocer que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) autorizó el uso de nuevas semillas de maíz biotecnológico y continúa revaluando algunos permisos que habían sido negados previamente. Aunque remarcó que el maíz importado de Estados Unidos es complementario y se destina al uso industrial y a la alimentación de animales.

La Secretaría de Economía advierte también que “si bien el decreto plantea que la industria y el sector forrajero transiten de usar maíz genéticamente modificado a maíz no genéticamente modificado, esto no significará restricciones al comercio, como se señala en la solicitud de consultas” y sólo establece que esta transición se llevará a cabo de forma gradual y sostenible, fortaleciendo la competitividad y la productividad en el campo mexicano.

Entrevistado al respecto, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, desestimó que el panel de controversias solicitado por Estados Unidos represente un riesgo para el país e incluso vio la posibilidad como bueno, pues, dijo, en otra controversia México ya ha ganado en estas mesas de arbitraje internacional.

“Los paneles yo los veo en general como un método positivo porque antes no teníamos paneles, Estados Unidos te aplicaba los aranceles y ya, porque hay una asimetría de poder muy grande, nuestra economía es 20 veces más pequeña. La ventaja es que tú de entrada ganas 19 lugares; eres igual, ¿y quién al final tiene la razón? Pues el que presente los mejores argumentos”, subrayó el canciller, tras asistir a Newport Beach, California donde recibió un premio de la fundación “Patient Safety Movement”.

El canciller agregó que en el caso de este tipo de mesas los socios comerciales se presenten como iguales y sus argumentos son escuchados por un grupo de expertos que al final determinará quién tiene la razón.

“Ya ganamos uno (un panel), el de reglas de origen en la industria automotriz”, recordó al ser cuestionado sobre esta iniciativa que presentó la representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai.