Yolanda Andrade narra cómo compartía adicciones con Julio César Chávez

La vida de Yolanda Andrade no ha sido tan divertida como a veces pareciera. Hace algún tiempo declaró que en su época de juventud estuvo sumergida en las adicciones y que inició esta etapa dado el trauma que le ocasionó la muerte de su papá.

Declaró que cayó en depresión y que incluso, intentó terminar con su vida porque se sentía culpable de que a su papá le hubiera dado un infarto fulminante, ya que horas antes habían discutido.

¿Por qué intentó suicidarse Yolanda Andrade?
“Intenté suicidarme, me puse una pistola, le jalé, brincó la bala, gracias a Dios. Mi hermana me vio al momento que abrió la puerta del baño, y yo con la pistola en la boca, ya la había jalado y dije: ‘Ay, Dios Mío’. Fue lo último que vi, la imagen de mi hermana y pues… estuvo muy duro”, declaró el año pasado durante una de las emisiones del programa Montse & Joe.

Hoy, Yolanda Andrade vuelve a recordar sus tiempos de excesos y lo hizo durante una entrevista que tuvo con Isabel Lascurain para su programa en YouTube. Comentó que ha estado en tres clínicas de rehabilitación y que la vez más reciente se la llevaron mientras conducía ‘Netas Divinas’.

“Yo era muy alcohólica, me tomaba dos botellas diarias de whisky o vodka, y lo combinaba con cocaína, que me encantaba”, relató a la integrante del grupo Pandora.

¿Por qué se encerraba Yolanda Andrade con Julio César Chávez en el baño?
Dijo que en alguna temporada se acercó a José José para contarle de su situación, pero nunca bebieron juntos; sin embargo, sí lo hizo con el ex boxeador Julio César Chávez y sucedía después de que él peleaba en el ring, pues siempre han sido muy buenos amigos.

“Eran tres días encerrados en el baño con una bolsa de coca. Él terminaba una pelea y era el éxito rotundo, la locura, las felicitaciones, los artistas que llegaban a saludarlo. Me acuerdo perfecto que fueron Madonna y Robert de Niro… y nos encerrábamos en el baño y ahí durábamos mucho tiempo, nos amanecíamos con una grabadora y escuchábamos a Mijares, la de ‘Uno entre mil’, la ponía hasta que se rayaba el disco”, recordó.

En ese tiempo, narró, lloraban y platicaban. “Y era una tristeza que quizá teníamos los dos, pero la única alegría que nos daba porque estábamos los dos juntos, tomando en un baño y con una grabadora”, explicó la conductora.

Reveló que en varias ocasiones creyó que tocaba fondo, pero se dio cuenta que siempre hay más fondo y no podía parar.

La reciente vez que le sucedió, dijo, fue mientras formaba parte de la mesa de conductoras de Netas Divinas. “En el programa ya no nos daban vino porque me tomaba el de todas y era un problema porque el llamado era a las 7 de la mañana y ya me había tomado la botella».