En vísperas de que entre a México la primera ola de calor, ya se ha registrado 133.9 por ciento más incendios forestales que en el mismo periodo del 2024, y en cuatro veces más del territorio nacional, lo que ha comenzado a generar preocupación entre especialistas, que advierten un panorama más severo que en otras épocas como consecuencia de las manifestaciones climáticas de los últimos años.
Del 1 de enero al 27 de febrero se han registrado 545 incendios en 31 mil 138 hectáreas, lo que supera los 233 siniestros del año pasado que impactaron siete mil 632 hectáreas, de acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
- El Dato: La Conafor señala que en 29.87% de los casos se desconoce qué provocó los conatos; 23.47% son de manera intencional y 17.87% por actividad agrícola.
Además, tanto el número de incendios como el de hectáreas son los más elevados registrados por lo menos desde el 2019, cuando hubo 200 siniestros que impactaron dos mil 893 hectáreas. Desde entonces, lo más alto a lo que había llegado el país en el mismo periodo fue de 430 incendios en el 2021, con nueve mil 827 hectáreas siniestradas.
De acuerdo con el reporte, de la superficie afectada en lo que va del año, 95 por ciento correspondió a vegetación en los estratos herbáceo y arbustivo, y el cinco por ciento a arbóreo.
Los estados de la República con mayor impacto por los incendios son: Jalisco, Chihuahua, Michoacán, Ciudad de México, Estado de México, Puebla, Morelos, Durango, Veracruz y Aguascalientes, que representan 82 por ciento del total nacional.
Las entidades federativas con mayor superficie afectada son: Baja California, Chihuahua, Sinaloa, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas, Durango, Michoacán, Chiapas y México, que representan 93 por ciento del total nacional.
Esta situación se vislumbra con agravamiento, pues de acuerdo con el director general de la División de Ciencias Forestales de la Universidad Autónoma Chapingo, David Cintora, 60 por ciento del territorio con clima templado corre riesgo ante el estrés que genera el cambio climático, las temperaturas y la disminución de lluvia en los sistemas forestales.
Además, el experto puntualizó que en zonas donde predomina el pino se ha incrementado la invasión de diversas especies, pero principalmente el gusano barrenador, que llega a los ejemplares bajo estrés y los consume. Debido a que este proceso puede demorar hasta un año, es que se prevé que sea ahora cuando se vean estos escenarios debido a las olas de calor y otras alteraciones de años pasados.
Advirtió que las entidades con mayor riesgo son Chihuahua, Durango, Oaxaca, Michoacán, Jalisco, Estado de México, Puebla, Tlaxcala e Hidalgo.
- 200 siniestros registró la Conafor durante el 2019
A esto se suman las manifestaciones meteorológicas en extremo que se dieron el año pasado, pues explicó que las fuertes lluvias que se dieron provocaron el crecimiento de vegetación que, ahora con la transición de temporada, se convertirán en ramas y demás plantas, así como hierbas secas que las harán material inflamable, por su natural muerte ante el calor.
“El año pasado igual hubo altas temperaturas; al inicio del año hubo sequías, pero después de la mitad del año se dejaron venir las lluvias. ¿Qué trae con esto? Un beneficio, porque se recargaron los mantos acuíferos; pero, ¿qué trajo como consecuencia? El crecimiento de mucha hierba, de especies vegetales que, como son especies anuales, su ciclo es anual; al final del año se secan y se convierten en combustible. Ahorita, el principal riesgo que tenemos es controlar o, más bien, antes de controlar, prevenir los incendios forestales que tenemos”, advirtió.
Los especialistas han señalado que esperan este año hasta cinco olas de calor, por lo que las altas temperaturas podrían extenderse hasta octubre. Este martes había activos 22 incendios en 12 estados, de acuerdo con la Conafor.