Analistas prevén deterioro del panorama económico y ajustan proyecciones

La encuestas de expectativas de los especialistas del sector privado de abril publicada por el Banco de México este martes proyecta un aumento de la inflación y una baja en el crecimiento económico para el cierre del año.

Un poco más de inflación, un poco menos de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB). Los analistas del sector privado moderaron sus expectativas para el comportamiento de la economía en el 2024, informó el Banco de México.

De acuerdo con la Encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado de abril difundida este jueves, la proyección de la inflación general aumentó de 4.10 a 4.16% respecto de los datos levantados por el banco central en marzo. Aunque en el caso de la subyacente, ésta tuvo un ajuste a la baja, al pasar de 4.19 a 4.09 por ciento.

En tanto, para el crecimiento de la economía, la media de la estimación de los analistas es que el PIB tendrá este año un avance de 2.26%, lo que representa una baja respecto de la proyección de 2.36% presentada un mes antes.

Este ajuste en las proyecciones del panorama económico del país tuvo también un impacto en las expectativas en materia de política monetaria, pues los especialistas del sector privado estima que la tasa de fondeo interbancario del Banxico será al cierre del año de 9.85%, después de haberse estimado en promedio en 9.54% en marzo.

Este deterioro en las expectativas no sólo tuvo un impacto en lo que se espera del comportamiento de las variables económicas del país en el 2024, sino también para el 2025, ya que aunque se mantiene la perspectiva de inflación frente a lo proyectado hace un mes (3.73%), sí se revisó a la baja la estimación de crecimiento del PIB de 1.92 a 1.85%, mientras que aumentó la de la tasa de interés de 7.52 a 7.72 por ciento.

Entre los factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México en los próximos seis meses, los especialistas consultados por el banco central consideran que los principales riesgos están relacionados con la gobernanza, específicamente con los problemas de inseguridad pública (24%); corrupción (9%); otros problemas de falta de estado de derecho (9%); impunidad (7%) y la incertidumbre política interna (7%), así como con la ausencia de cambio estructural en México (7%) como parte de las condiciones económicas internas.